Desde que Masaccio pintara su Trinità, en 1425, la pintura y la arquitectura estrecharon una relación indisoluble que implica un modo determinado de comprender el espacio. Dentro de este ámbito, la obra de Guillermo Kuitca también puede leerse, entre la extensísima gama de sentidos que ella propone, como una singular reflexión sobre el espacio arquitectónico y sus connotaciones, fundamentalmente antropológicas. Recorrer la muestra “Kuitca 86”, que se exhibió hasta el mes pasado en el MALBA, constituyó una oportunidad inmejorable para ampliar los márgenes de nuestras propias ideas sobre el espacio que habitamos, y específicamente proyectamos, para que otros lo habiten.

Pintura de Introducción: "Homenaje a Van Gogh" - Guillermo Kuitca 1986

Link evento MALBA: https://www.malba.org.ar/evento/kuitca-86/